Queridos amigos;
Es para mí un honor y gran placer convivir con ustedes en este foro nuestro, íntimo y cálido, tan parecido a lo que considero hogar.
Inicío mis participaciones compartiéndoles esta poesía intitulada "Arriba, Corazón", de la autoría del gran médico español Don Gregorio Marañón. Hombre de ciencias, célebre en su ámbito por sus descubrimientos y trabajos en endocrinología, humanista y filósofo, es tristemente menos conocido como poeta.
Esta exquisita obra es una muestra de su capacidad literaria, además de un canto a la vida. Qué mejor forma de ayudar a un corazón que recordándole de vez en cuando el secreto de la felicidad. Espero que lo disfruten enormemente, se les quiere mosssho!!!!
Caminante.
¡Arriba Corazón! la vida es corta
y hay que aprender a erguirse ante el destino,
sólo avanzar importa
arrojando el dolor por el camino.
Otras horas felices
matarán estas horas doloridas,
lo que hoy son heridas
se tornarán mañana, cicatrices.
Espera siempre, corazón, espera
que ninguna inquietud es infinita
y hay una misteriosa primavera
donde el dolor humano se marchita.
Con tu espuela de plata
no des paz al corcel de la ilusión,
si la pena no muere…se le mata
¡Arriba corazón!
Gregorio Marañón.
Es para mí un honor y gran placer convivir con ustedes en este foro nuestro, íntimo y cálido, tan parecido a lo que considero hogar.
Inicío mis participaciones compartiéndoles esta poesía intitulada "Arriba, Corazón", de la autoría del gran médico español Don Gregorio Marañón. Hombre de ciencias, célebre en su ámbito por sus descubrimientos y trabajos en endocrinología, humanista y filósofo, es tristemente menos conocido como poeta.
Esta exquisita obra es una muestra de su capacidad literaria, además de un canto a la vida. Qué mejor forma de ayudar a un corazón que recordándole de vez en cuando el secreto de la felicidad. Espero que lo disfruten enormemente, se les quiere mosssho!!!!
Caminante.
¡Arriba Corazón! la vida es corta
y hay que aprender a erguirse ante el destino,
sólo avanzar importa
arrojando el dolor por el camino.
Otras horas felices
matarán estas horas doloridas,
lo que hoy son heridas
se tornarán mañana, cicatrices.
Espera siempre, corazón, espera
que ninguna inquietud es infinita
y hay una misteriosa primavera
donde el dolor humano se marchita.
Con tu espuela de plata
no des paz al corcel de la ilusión,
si la pena no muere…se le mata
¡Arriba corazón!
Gregorio Marañón.